Libros de texto gratuitos de primero de primaria
Cuando comenzó en nuestro país el tan polarizado tema sobre los libros de texto gratuitos, un respetable amigo mío, fiel seguidor de AMLO, me mandó un mensaje que decía más o menos así: usted, mejor que nadie, sabe que la educación no depende de los libros de texto y los programas. “¿A poco los contenidos de los programas educativos lo impulsaron a usted? Yo creo que fueron sus papás los que lo obligaron a leer hasta con unos cinturonazos”. Hasta aquí el texto de mi amigo.La verdad, mi papá nunca me dio la oportunidad de leer. Yo me hice con
los libros de texto gratuitos. Cuando me encontraba algún libro o pedazo de
periódico, me escondía en un rincón para leerlo. Un día me encontré un libro
prohibido que lo tenían bien escondido mis papás. Era un libro que hablaba
desde la gestación hasta el nacimiento del bebé. Ese libro me trastorno. Pero
no quiero hablar de los libros de educación sexual y reproductiva que maneja
este gobierno. Sólo les puedo decir que este tipo de educación puede trastornar
también a los niños.
Los libros de texto gratuitos de la SEP, creo que son los más
importantes de la vida. Acabo de leer los libros de primero de primaria. Me
entristece que esos niños, no vayan a tener la oportunidad de aprender a leer.
De entrada, todos estos libros son puro rollo. Son un chorizo interminable que
un niño de seis años no va tener la capacidad de asimilar los kilómetros de
textos impresos en las hojas.
Se acabaron aquellas lecciones en las que aprendimos a reconocer las
vocales y luego el abecedario. Se acabó el oso, dado, Tito, la pelota, la sala.
Y las mini lecciones de: “Ese oso, se asea así. Si se asea. Así es su oso”. Y a
lado de cada historia había una hoja rayada para que pudiéramos escribir la
misma lección.
Algo más que me preocupa de estos libros de primero de primaria, es la
desaparición de las matemáticas. Sabemos que cuanto más temprano se tenga un
entendimiento de esta asignatura, los resultados serán superiores durante el
desarrollo del niño.
Si les quitaron las matemáticas, ¿cómo van a hacer para leer obras
literarias que requieren conocimientos matemáticos? ¿Cómo van a poder acercarse
a las obras de ciencia ficción que se basan en conceptos matemáticos, como la
geometría, el humor, la fantasía, el misterio, la poesía, o lo último, la
inteligencia artificial? ¿Cómo van a leer las obras o cuentos de Isaac Asimov,
Jorge Luis Borges, Julio Cortázar o Umberto Eco, si no tienen una formación
matemática? Se me ocurre en este momento “Alicia en el país de las maravillas”
y “Alicia a través del espejo”. Estas dos obras clásicas de la literatura
infantil están llenas de referencias matemáticas, lógica y filosofía que
reflejan la formación del escritor Lewis Carroll.
Un libro que leyeron mis hijos cuando eran niños: “Planilandia”. Esta
obra trata sobre la geometría, las dimensiones y la percepción espacial.
Otro es “El diablo de los números”. Esta obra literaria requiere
conocimientos matemáticos para ser leída y entendida. Es un cuento para niños
que explora las matemáticas de una forma divertida y original.
Si a los niños les quitan esto y les enseñan que el asesinato no es
asesinato sino un área de oportunidad, ¿qué quiere este gobierno para las
siguientes generaciones? ¿Que pierdan toda sensibilidad y vean el asalto, el
asesinato o a la violación como áreas de oportunidades?
¿Es eso lo que quieres para tus hijos, padre de familia?
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